El sistema de archivos exFAT (Extended File Allocation Table) de Microsoft está recibiendo una importante mejora de rendimiento en Linux, gracias a las contribuciones de los ingenieros de Sony. Esto marca otro hito en la colaboración de Microsoft con la comunidad de código abierto, tras la decisión de la compañía de dar soporte a exFAT en Linux en 2019.
Las últimas mejoras se centran en optimizar el rendimiento del sistema de archivos exFAT, particularmente en escenarios que involucran archivos grandes y operaciones de datos extensas. Una mejora notable es la introducción del procesamiento por lotes para la opción «descartar montaje».

Esta función informa a los dispositivos de almacenamiento sobre los bloques que ya no están en uso, lo que permite realizar operaciones de descarte en tiempo real. Al descartar grupos contiguos por lotes, la nueva optimización reduce drásticamente el tiempo necesario para el borrado de archivos (aunque siempre se puede convertir exFAT a FAT32). Por ejemplo, eliminar un archivo de 80 GB lleva ahora menos de 2 segundos, frente a casi 5 minutos, lo que supone una asombrosa mejora de 172 veces.
Las aportaciones de Sony también abordan la corrupción aleatoria de la pila, los retornos de error incorrectos y los bucles interminables en determinadas operaciones. Estas correcciones aumentan el rendimiento y mejoran la estabilidad y fiabilidad del sistema de archivos exFAT en Linux.