La IA está transformando el panorama laboral en el sector de la consultoría. Las principales firmas internacionales —McKinsey, Boston Consulting Group (BCG), Bain & Company y las Big Four (Deloitte, EY, KPMG y PwC)— han decidido congelar los salarios de los perfiles junior por tercer año consecutivo. Este fenómeno refleja un cambio estructural profundo: la tradicional pirámide de contratación masiva de recién graduados se está estrechando, mientras las empresas buscan perfiles más especializados y experimentados.
Este artículo analiza las causas, consecuencias y perspectivas de esta tendencia, ofreciendo una visión completa para profesionales, estudiantes y empresas que siguen de cerca la evolución del mercado laboral en consultoría.
La pirámide tradicional en crisis
Históricamente, las grandes consultoras han basado su modelo en una estructura piramidal:
- Amplia base de analistas junior, encargados de recopilar datos, elaborar informes y preparar presentaciones.
- Capas intermedias de managers, responsables de coordinar proyectos y equipos.
- Cúpula de socios senior, que lideran la estrategia y mantienen la relación con los clientes.
La irrupción de la IA está erosionando esta base. Las tareas rutinarias de análisis de datos y generación de informes, antes realizadas por jóvenes recién incorporados, ahora pueden ser automatizadas con herramientas de machine learning y sistemas de IA generativa.
Impacto directo en los salarios
Según datos recientes, los paquetes salariales de primer año para graduados en McKinsey, BCG y Bain se han mantenido entre 135.000 y 140.000 dólares en 2024 y 2025, mientras que los MBA alcanzan cifras de 270.000 a 285.000 dólares. Sin embargo, estas cifras llevan años sin incrementarse, lo que supone una congelación en términos reales frente al aumento del coste de vida.
En las Big Four, los salarios iniciales —tradicionalmente más bajos— permanecen estancados desde 2022. La presión de la IA sobre la productividad ha reducido la necesidad de contratar grandes volúmenes de personal junior, lo que se traduce en una política salarial más conservadora.

Razones detrás de la congelación
- Productividad aumentada por la IA:
- Las consultoras obtienen más valor con menos empleados junior.
- Herramientas de IA generan informes, análisis de mercado y presentaciones en minutos.
- Cambio en los perfiles demandados:
- Mayor interés en ingenieros, especialistas en datos y profesionales con experiencia tecnológica.
- Menor atractivo de perfiles generalistas recién graduados.
- Costes laborales crecientes:
- Seguridad social, salario mínimo y otros factores presionan los márgenes.
- Invertir en IA y externalización resulta más rentable que ampliar plantilla junior.
- Estrategia de contratación conservadora:
- Anticipación de beneficios futuros de la IA.
- Reducción de riesgos en un mercado global más complejo.
Consecuencias para los jóvenes profesionales
La congelación salarial y la reducción de contrataciones impactan directamente en los recién graduados:
- Menor acceso a oportunidades en firmas de prestigio.
- Competencia más intensa por los puestos disponibles.
- Necesidad de especialización en áreas como análisis de datos, programación, IA aplicada y gestión tecnológica.
- Desplazamiento hacia empresas boutique o startups de IA, que ofrecen alternativas más dinámicas.
Transformación del modelo de negocio
Las consultoras están reconfigurando su propuesta de valor:
- Menos consultoría estratégica tradicional, más proyectos de implementación tecnológica.
- Mayor demanda de perfiles senior, capaces de liderar proyectos complejos.
- Reducción de la base piramidal, con estructuras más planas y equipos más especializados.
Este cambio no significa la desaparición de los puestos junior, pero sí una redefinición de su rol. En lugar de tareas rutinarias, los jóvenes deberán aportar creatividad, capacidad de gestión de sistemas de IA y habilidades híbridas.
Perspectivas de futuro
Aunque algunos ejecutivos defienden que la pirámide no desaparecerá por completo, es evidente que se está contrayendo. Se prevé:
- Nuevos puestos junior orientados a la gestión de IA, supervisión de algoritmos y control de calidad de datos.
- Mayor inversión en formación interna, para capacitar a empleados en el uso de herramientas digitales.
- Expansión de boutiques de IA, fundadas por exsocios de grandes consultoras, que apuestan por modelos más ágiles.
- Revalorización del talento senior, como garante de criterio experto en un entorno automatizado.
La congelación de salarios junior en el mundo de la consultoría por culpa de la IA no es un fenómeno aislado, sino el reflejo de una transformación estructural impulsada por la inteligencia artificial. El modelo piramidal se contrae, los perfiles demandados cambian y los jóvenes profesionales deben reinventarse para seguir siendo competitivos.
La consultoría del futuro será menos dependiente de grandes volúmenes de analistas y más orientada a la integración de tecnología, la gestión de IA y el liderazgo experto. En este nuevo escenario, quienes sepan adaptarse tendrán más oportunidades de destacar.