Los proveedores cloud necesitan apoyar a sus clientes a raíz del COVID-19. Deben hacerlo de manera proactiva, demostrando así fuerza y adaptabilidad de sus ofertas de servicios.
El COVID-19 ha dejado ya a muchas organizaciones inseguras de si su estrategia de continuidad de negocio es lo suficientemente sólida. Esto se nota particularmente cuando se trata de servicios cloud. La dependencia de las herramientas de videoconferencia y colaboración ha enfatizado los límites de los servicios de soporte de back-end. Esto es a la vez que aumenta el volumen de tráfico de red. Sin embargo, los proveedores de la nube con una infraestructura robusta y en exceso, combinados con planes de recuperación ante desastres para responder a tal crisis, se están manejando con éxito en la nueva normalidad.
¿Por qué los proveedores cloud necesitan apoyar a sus clientes a raíz del COVID-19?
A medida que los líderes de IT comienzan a considerar soluciones en la nube a largo plazo, se enfrentan a preguntas desafiantes sobre la resistencia y fiabilidad de la nube. Al mismo tiempo que el COVID-19 ha puesto a la nube como centro de atención, también ha puesto a los proveedores en una posición única. Deberán tranquilizar a los clientes sobre su fortaleza y adaptabilidad.
Los proveedores que fallarán en este momento son los que aún abordan el debate de los centros de datos locales frente a la nube. Los clientes ahora preguntan sobre la adaptabilidad de su servicio cloud actual, que se vieron obligados a adoptar si decidieron continuar usándolo después de la pandemia.
Los proveedores deben demostrar que sus servicios son lo suficientemente resistentes como para manejar picos aleatorios de demanda. Con esto mostrarán su exceso de capacidad para desplegar rápidamente los nuevos servicios. Para que los clientes puedan estar seguros, ¿pueden los proveedores demostrar que están respaldados por una infraestructura subyacente lo suficientemente sólida?
Aliviar las preocupaciones de los lcientes demostrando gran capacidad para manejar picos
La computación cloud es un modelo que está diseñado inherentemente para satisfacer la demanda fluctuante. Los servicios cloud bien diseñados están hechos para manejar picos de demanda inesperados. Si se implementan correctamente, estos servicios están bien posicionados para admitir solicitudes crecientes, como las exhibidas durante esta crisis del COVID-19.
Sin embargo, todos los días surgen más informes de ralentizaciones o incapacidad absoluta para manejar cargas mayores. Las razones de esto son variadas. El aumento de los trabajadores remotos significa una mayor carga en las VPN y los servidores que manejan sus conexiones. Si bien las empresas han gastado dinero para desarrollar su capacidad existente para manejar el trabajo remoto, pocas se han acercado a la capacidad de aprovisionamiento. Esto significa que cualquier reducción en la calidad del servicio parecerá a los ojos de los usuarios finales una disponibilidad limitada del ancho de banda y cargas más lentas.
Los proveedores cloud deben diseñar sus redes para manejar estos picos, como ya hemos dicho. La implementación de tecnologías avanzadas de ingeniería de tráfico será crucial.
Dar publicidad a pruebas de estrés
Además de gestionar el aumento del tráfico, los equipos de operaciones deben poder mantener la disponibilidad y rendimiento del servicio mientras ellos trabajan de forma remota. Además, los componentes que alimentan los recursos del centro de datos en la nube, como chips o servidores, pueden ser escasos debido a las interrupciones de la cadena de suministro que enfrentan las instalaciones de fabricación. Los clientes que entienden estas realidades quieren estar seguros de que su proveedor está lidiando con los posibles cuellos de botella en el servicio sin problemas y de manera efectiva.
Al poner a prueba públicamente la infraestructura de la nube y explicar los resultados en el contexto de períodos de variación extrema, los proveedores de la nube estarán bien posicionados para abordar las preocupaciones de resilencia del ciente. Estas surgen naturalmente al comparar soluciones a largo plazo después de la pandemia.
Permitir que los clientes participen en esta discusión generará confianza en los planes de resilencia.
Participar en la filantropía de clientes y empleados
Muchos clientes de la nube se enfrentan a desafíos de ingresos durante estos tiempos y recordarán a los proveedores que los ayudaron. Si se puede actuar como punto intermedio al ofrecer ayuda financiera a los clientes, especialmente a las PYMEs, un proveedor cloud fuerte debería hacerlo. Hay muchas posibilidades para explotar esta iniciativa. Lo más sencillo es considerar la posibilidad de proporcionar colaboración basada en la nube y capacidades de conferencia con descuento o incluso de forma gratuita, al menos durante un período de tiempo limitado.