Las empresas no son ajenas a Active Directory (AD). La gran mayoría de las organizaciones han confiado en el servicio de gestión de acceso e identidad durante muchos años. Una nueva era de gestión de activos.
Sin embargo, se necesita un enfoque más ágil para el entorno de trabajo profesional híbrido que ahora es una realidad.
De hecho, la pandemia sacudió a las empresas desde todos los rincones. AD era la columna vertebral confiable de la mayoría de las organizaciones cuando todos sus trabajadores se reunían en el mismo edificio. Sin embargo, la superficie de ataque cibernético ampliada de una fuerza laboral híbrida significa que ahora hay complicaciones adicionales al implementar AD en una empresa.
«Active Directory es como la columna vertebral de una empresa y debe protegerse de cerca». Esto lo dijo Matt Lock, director técnico de la firma de seguridad de datos Varonis. «Si un atacante logra tomar el control de AD, efectivamente tiene las llaves de una organización reino digital. Con ello, tienen acceso en todo el dominio, donde pueden causar daños graves”.
Una nueva era de gestión de activos
Los problemas se reducen a la visibilidad. Es mucho más difícil supervisar todos los activos dentro de una empresa cuando sus trabajadores están tan fragmentados geográficamente. Hay que tener en cuenta también las complejidades que surgen con la creciente popularidad de las políticas de «trae tu propio dispositivo» (BYOD). Además de la forma en que los trabajadores personalizan su software con activos adicionales como complementos de mercados de terceros.
Llevar más procesos comerciales a la nube ha sido tradicionalmente el enfoque fácil y directo para la transformación digital de todas las cosas. La implementación de AD no es diferente. La nube ofrece una serie de beneficios para las empresas que buscan mantener controles de seguridad estrictos en la oficina y los trabajadores remotos. Esto incluye una vista más completa de los activos digitales de la organización y controles de seguridad más optimizados.
Ahora que el panorama de la seguridad cibernética es tan amplio y las empresas están en el punto de mira desde todos los ángulos, es más importante que nunca tener la gestión de activos de la organización en plena forma. Cambiar AD a la nube es el mejor enfoque para las empresas que buscan mantenerse seguras en un mundo de trabajo híbrido.
Para la mayoría de las organizaciones, la gestión de activos antes de la COVID era un ejercicio relativamente sencillo de seguimiento de usuarios y dispositivos. Ahora que el perímetro de trabajo y amenazas se ha trasladado a los hogares de su fuerza laboral, hacer un seguimiento de todo el estado de TI y garantizar que se mantengan altos niveles de seguridad se ha vuelto mucho más complejo. La migración de AD a la nube puede brindar más supervisión y soporte integrado a los usuarios que lo necesitan para asegurar sus equipos y conexiones de red.
Muchas empresas ven la migración continua de AD a la nube como la solución a los problemas que enfrentan al administrar la variedad de activos que utilizan sus negocios. Con la seguridad en mente, migrar un AD a una plataforma en la nube puede ofrecer un nivel de aislamiento frente a algunos ciberataques.
El enfoque holístico para administrar lo que podría ser una amplia gama de dispositivos que ahora se utilizan en su empresa requiere que sus sistemas de control y seguridad cambien. Las empresas están creando cada vez más sistemas unidos a un dominio y BYOD/no unidos a un dominio para obtener la máxima flexibilidad con los activos que utiliza su personal. Al mismo tiempo, ofrecen una infraestructura de seguridad que es más resistente que una simple solución local o en la nube.