Por si no fuera suficientemente evidente, el audaz plan de Microsoft de incorporar la inteligencia artificial (I.A) a Windows 11 es un gran paso adelante. Esto incluye extender estas capacidades de I.A a apps de terceros. Se trata de mejorar la experiencia de usuario y dar a los desarrolladores el poder de hacer apps más inteligentes y de reacción más rápida.
Copilot quiere dar un paso más allá
El mundo de la I.A puede parecer un laberinto para los desarrolladores, pero se aclara con el documento de soporte de Microsoft. En él se ofrece una visión general de los fundamentos para integrar la I.A en las aplicaciones cliente de Windows, que incluye sugerencias para utilizar modelos de I.A de forma local o alojados en la nube junto con marcos de trabajo como OnnxRuntime. También se sugieren lenguajes de programación como C#, C++ y Python para desarrollar estas aplicaciones, asegurando que el documento proporciona los consejos necesarios para iniciar este camino.
Microsoft Copilot Runtime es un elemento especial de este proyecto, que comprende una serie de APIs locales y en la nube basadas en IA. Entre ellas se encuentran Phi Sillica para la creación de textos, OCR para la identificación de textos y DALL-E para la creación de imágenes. Estos instrumentos ayudarán a los programadores a incorporar aspectos de I.A en sus aplicaciones, mejorando la funcionalidad y la interacción con el usuario.